En otras ocasiones, como hablábamos en una publicación que hicimos en comunidades, existe una tensión exagerada del músculo puborectal debido a la POSICIÓN SENTADA que hemos adoptado los humanos para defecar. En el momento en que nos encontramos en cuclillas, este músculo se encuentra mucho más relajado dando permiso así el paso de las heces. Si ya has aprendido a encontrar y contraer adecuadamente los músculos del suelo pélvico, serás con la capacidad de ponerlo en práctica en el momento en que sientas una urgencia fecal y te dirijas hacia el baño mucho más próximo. Los ejercicios de suelo pélvico, en el momento en que son enseñados apropiadamente y supervisados por un profesional cualificado, mejoran la fuerza, la resistencia y el control de la musculatura perineal, lo que repercute en una mejora de la incontinencia de esfínteres. Este cierre del esfínter anal compuesto por fibras musculares del suelo pélvico puede entrenarse a través de el fortalecimiento de las mismas a través de ejercicios perineales y del empleo de otras técnicas fisioterápicas como el biofeedback y la electroestimulación.
La realización de ejercicios para hacer mas fuerte los músculos de la pelvis puede ser muy útil en el régimen de la incontinencia fecal. Para llevar a cabo ejercicios de Kegel, contraiga los músculos del ano, los glúteos y la pelvis y luego manténgalos contraídos tan fuerte como resulte posible para posteriormente ir relajando de forma lenta. Imagínese que usted está tratando de parar el fluído de materia fecal o intentando de no pasar el gas. Una serie de 30 de estos ejercicios tienen que hacerse tres veces cada día. En unas unas semanas, los músculos del suelo pélvico va a ser más fuerte y con cierta frecuencia la incontinencia optimización o se resuelve.
Ejercicio: Rápido
Aguantamos unos momentos y contraemos el piso siguiente para ir poco a poco subiendo el ascensor hasta el piso 5°. Finalmente, y de forma progresiva, vamos en sentido inverso bajando el ascensor hasta el nivel mucho más bajo. En este momento empujamos, como en el parto, e intentamos despedir el ascensor tal y como si lo enviásemos al sótano. No olvidar respirar normalmente y no contraer los músculos abdominales. Es una flexión de cadera de 90 grados que permita evacuar de forma natural y sin esfuerzo (relajando así el músculo anteriormente citado, el músculo puborectal). Es importante no dejar de respirar para no aportar presión al suelo pélvico y acostumbrar a nuestro cuerpo a ir al baño a exactamente la misma hora.
Hazlo con la máxima intensidad viable, manteniéndola entre 3 y diez segundos. Tras cada contracción, relaja los músculos de forma lenta, dejando que retornen a su situación inicial. Tras 8-12 contracciones, que es una serie, tienes que realizar un corto reposo, segundos.
Muchas Gracias, Mr Kegel
Recurre a técnicas de control de la urgencia que te asistan a ganar tiempo para llegar al WC; como por servirnos de un ejemplo sentarte, realizar respiraciones diafragmáticas, y manejar la ansiedad asociada al escape. Vas a poner tu intestino a trabajar desde primera hora, merced a los reflejos gastrocólico y duodenocólico que generarán movimientos de masa en el intestino abultado. Vigila la ingesta de fibra insoluble que hace pasar más veloz los alimentos a través del intestino y incrementa el riesgo de escapes fecales, hinchazón y gases. Elige alimentos que aumenten la solidez de tus heces, como el arroz blanco hervido, el pan blanco, la pasta, los plátanos, el queso o el youghourt, entre otros.
Si los resultados obtenidos aconsejan continuar, se pasaría al segundo ciclo con sesiones quincenales y después al tercer ciclo con sesiones mensuales. Más tarde en esos casos necesarios se tienen la posibilidad de dar sesiones de recuerdo. Los ejercicios para fortalecer y tensar el esfínter anal pueden contribuir a tratar la incontinencia intestinal o a achicar la posibilidad de que se produzcan pérdidas de heces o gases en el futuro. El esfínter anal está compuesto por gruesas bandas musculares. Rodean la entrada del ano y pueden abrirse y cerrarse.
Tienes que hacer maniobras extrañas para mear o defecar tales como presionarte el abdomen o procurar abrir manualmente el esfínter anal. A fin de que nos entendamos hablamos de un juego de presiones, cierres y aperturas. Este desarrollo de contracciones no es innato al ser humano, sino que es un aprendizaje que hicimos en el momento en que comenzamos a dejar de utilizar el pañal y, se ha convertido en un impulso natural de nuestro cuerpo. Los ejercicios de Kegel se fundamentan en este juego de presiones.
Activa la musculatura abdominal, reduciendo el diámetro de tu abdomen, al tiempo que aproximas las rodillas poniendo en acción los músculos aductores y el suelo pélvico. Mantén esta situación 4-5 segundos, suelta el aire y relaja el abdomen y las piernas. Tener unos músculos de suelo pélvico bien robustecidos y entrenados permite un mayor nivel de continencia sobre heces y orina. Este plano muscular o suelo pélvico está reforzado con una mayor proporción de fibra muscular en forma de esfínteres o anillos musculares que cubren los tres agujeros mencionados, y que permiten cerrarlos y contener la orina y las heces.
La incontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de orina sin control del llenado y vaciado de la vejiga, existiendo en ocasiones un fuerte deseo de mear. Por favor alguna página donde pueda conseguir esos plugs que afirma?? No consigo por ningún lado esos plugs con base en forma de tira.
Empieza llevando el dildo una hora cada día y ve incrementando los periodos hasta que veas que el terreno empieza a ensancharse hasta el punto que tú desees. Dispositivo circular de plástico implementado alrededor del ano. El dispositivo puede ser inflado como un globo para impedir el paso de las heces. La persona evacúa al desinflar el manguito de presión, el cual se infla de forma automática a los diez minutos. Hay 2 músculos principales cuya tensión hace difícil la salida de las heces.